Royal Demon Rose (ロイヤルデモンローズ, Roiyaru Demon Rōzu) también llamada Rosa Diabólica Real es un tipo de rosas rojas especiales que habita en el Sanctuary de Athena.
Estas plantas son altamente peligrosas debido al veneno que desprende su aroma. Es por ello que son la última barrera de los Doce Templos, manifestándose ante los enemigos en la senda al Templo del Pontífice. Se dice que fueron plantadas en ese lugar en la era mitológica.
Esta rosa es usualmente empleada como arma de combate por el Saint de Pisces, ya que el hecho de respirarlas induce a una muerte lenta y sin sufrimiento, cuyo proceso implica la suspensión constante de toda capacidad sensorial de la víctima.
En Saint Seiya[]
En la Isla Andrómeda, Aphrodite de Pisces hace uso de este arma contra Albiore de Cepheus con el fin de facilitar a Milo de Scorpion la misión de sancionar con la muerte al Silver Saint. Este suceso, al igual que Albiore, es exclusivo de la adaptación animada.
Durante la batalla de los Doce Templos, el Saint de Pisces usa esta técnica contra Shun de Andromeda, limitando su vida gradualmente. No obstante, el joven se negaba a caer inconsciente.
Seiya de Pegasus, quien Aphrodite decide dejar cruzar el Templo de los Dos Peces confiando en el jardín de Demon Roses que se encuentra tras éste, recorre las escaleras hasta caer víctima de dicha trampa, perdiendo sus sentidos hasta desplomarse sobre los pétalos rojos y zarzas. A pesar de ello, es socorrido por Marin de Eagle, quien le presta su máscara para inmunizarse a la fragancia que desprenden las peligrosas plantas. Finalmente, en un intento desesperado de salvar a su entrenadora, Seiya disuelve el jardín con su Pegasus Ryūsei Ken.
En Episode.G[]
Rosas Demoníacas Reales en el Episode G
Aphrodite utiliza las rosas rojas para que el Gigante Zugylos de Anthrakma pierda sus sentidos para, a continuación, rematarle mediante una Bloody Rose.
En The Lost Canvas[]
Albafica extiende un jardín de Demon Roses frente al Sanctuary de Athena, manteniendo a raya a los Specters que osaban intentar introducirse en la tierra sagrada de Athena. Sin embargo, de nada sirvieron para detener el paso de Niobe de Deep debido a sus habilidades tóxicas, con las cuales hizo marchitar todas las rosas de Pisces que se encontraban a su alrededor. Además, Minos de Gryphon hace desaparecer del lugar la totalidad de estas plantas mediante su Gigantic Feathers Flap.
En el Gaiden 4, Albafica de Pisces le arroja estas rosas a Rusé de Black Crow, mas las evade fácilmente con su Defensa de Plumas Negras.
En Soul of Gold[]
Royal Demon Rose en Soul of Gold
Aphrodite de Pisces arroja estas rosas a Fafner de Nidhegg, clavándoselas en su cuerpo. De esta forma, Aphrodite puede leer los pensamientos de su enemigo, gracias a que las plantas logran invadir el sistema nervioso de Fafner para transmitirle la información al Saint de Pisces.
Víctimas de esta técnica[]
- Albiore de Cepheus: fue debilitado por ellas, perdiendo contra Milo de Scorpion.
- Shun de Andromeda: sus energías son reducidas gradualmente.
- Seiya de Pegasus: cayó inconsciente en el jardín de rosas cuando se dirigía hacia el Pontífice.
- Rusé de Black Crow: las evadió con su Defensa de Plumas Negras.
- Niobe de Deep (The Lost Canvas): repelía el aroma de las rosas gracias al veneno que desprende su Surplice.
- Minos de Gryphon (The Lost Canvas): se deshizo de ellas con un batir de alas de su Surplice.
- Fafner de Nidhegg: fue inmovilizado y envenenado. Además, las rosas leyeron su mente para que Aphrodite pudiese leer todos sus pensamientos.
- El Dios Maligno Loki: acompañadas por el Seki Shiki Meikai Ha, resultaron inútiles ante el escudo de Loki.
Videojuegos en los que aparece[]
Saint Seiya Senki PS3 Pisces Aphrodite - Royal Demon Rose 1080p
Es usada por Aphrodite de Pisces en:
- Saint Seiya The Sanctuary.
- Saint Seiya The Hades.
- Saint Seiya Sanctuary Battle.
- Saint Seiya Brave Soldiers.
- Saint Seiya: Soldiers' Soul.
Curiosidades[]
- Aphrodite de Pisces es el único personaje de Saint Seiya que demuestra inmunidad al veneno de la Royal Demon Rose. Seguramente se deba a su entrenamiento con ésta.
- El polen de estas rosas puede ser filtrado por las máscaras que emplean las mujeres Saint, esquivando por completo el efecto venenoso.
- En Next Dimension: Meiō Shinwa, cuando Saori y Shijima de Virgo escapan de Cardinale de Pisces, el jardín de rosas aparece ante ellos. Ésto hace saber que para el Santuario, la Athena del futuro resulta una amenaza.
- Los pétalos resultan ser realmente blancos cuando su veneno se disipó para no dañar a Saori.
- Cardinale demuestra tener control sobre las Royal Demon Roses, ya que se ocultaron cuando éste les ordenó que se retiraran.
- En The Lost Canvas: Meiō Shinwa, las características de estas plantas se ven completamente modificadas, siendo el contacto con sus pétalos y espinas lo que proporciona una muerte rápida, pero notablemente dolorosa.
- Se dice, por parte del padre de Agasha, que Albafica —así como los antecesores y sucesores del Saint de Pisces— adquirió una sangre envenenada debido a su longevo entrenamiento entre las Royal Demon Roses y su veneno. Sin embargo, esto se ve como la desinformación de un pueblerino gracias al primer tomo de The Lost Canvas: Meiō Shinwa: Gaiden. En esta historia se muestra que Albafica adquirió esta singularidad mediante un ritual que consistía en intercambiar sangre con su maestro Lugonis.
- Albafica posee una resistencia natural al veneno, lo cual percibió Lugonis de Pisces cuando lo vio abandonado de bebé en su jardín de rosas venenosas. No obstante, que un bebé sea deshechado en un lugar como ese, carece de explicación.
- En Soul of Gold, se da a entender que la Royal Demon Rose puede leer los pensamientos de la víctima si la rosa es clavada en su sistema nervioso.
- Cuando el dios Loki detiene las Demon Roses (y Sekishiki Meikai Ha de Death Mask) con su escudo, éstas, extrañamente se ven frenadas. Lo más habitual en Aphrodite sería lanzarlas alrededor de su enemigo, pues deben esparcir su polen venenoso y no es necesario el contacto directo. Además, el ataque produjo una pequeña explosión, lo cual carece de sentido, ya que ninguna de las técnicas se basa en fuerza de impacto.
